Se hace un análisis y diagnóstico profundo de la optimización a nivel de código html, se validan todos los aspectos de seguridad en la web (incluido manejos de plantillas no seguras de WordPress).

Se analiza la estructura de la web y la navegabilidad (sencillez de transitar por la misma), así como la disponibilidad de call to actions y/o puntos de encuentro con los visitantes.

Se analiza el nivel de SEO que tiene la página web, midiendo autoridad y relevancia del contenido y de la estructura web, así como la autoridad del dominio.

Se analizan y valoran (en caso de existir) los keywords por los que compite una página web, en búsqueda de integridad con el contenido.

Se revisa y valora el costo por conversión (en caso de existir), o en su defecto se evidencia la falta de KPI y se indica la forma en que se debe implementar y medir.

Se revisan todas las redes sociales utilizadas por la marca y se hace una valoración de cada una de ellas en función del tipo de producto que comercializa la empresa (por ejemplo, no es lo mismo vender chocolates, automóviles, casas, equipos especializados de fumigación). Se valoran, en un ranking la importancia de cada una de ellas en función del producto y/o marca.

Se validan todas las configuraciones de cada red social, para asegurar que la información básica que se muestra a las personas sea la correcta, pero además que la información de valor para los motores de inteligencia de cada red social, estén bien alineados con tipo de producto, mercado, etc. Esto, para buscar la eficiencia de cada motor de red social, sea orgánico o pagado.

Se estudia y evidencia los niveles socioeconómicos de los seguidores y su alineación con las propuestas comerciales de marca o de producto.

Se estudian las regiones donde se da la actividad principal de la marca, de tal forma que se pueda asegurar el impacto comercial en esa zona (por ejemplo tener una sucursal, o poder vender en línea) o en su defecto, para redirigir los esfuerzos de marca a los lugares correctos.

Se valida el alcance e interacción en los diferentes grupos demográficos por género y edad, para validar que estos grupos estén alineados con lo que se espera a nivel de producto y/o marca.

Se revisa la estrategia de publicaciones a la luz de la saturación de contenido en las diferentes redes. Se valida el tipo de contenido utilizado, así como la periodicidad de las publicaciones y los alcances orgánicos de cada uno de ellos. Se hacen las recomendaciones necesarias para mejorar los alcances orgánicos y se establecen KPIs esperables cuando se implementen los cambios.

Se estudia profundamente el historial de compra de publicidad paga en cada red social, se validan los costos por resultados y se comparan con los costos esperados para la industria del producto o la marca. Se hacen todas las recomendaciones de cambios y se documentan los resultados y mejoras esperables con esos cambios.

Listas de difusión (por correo electrónico y/o whatsapp).

En caso de existir, se miden los principales indicadores de envíos masivos de correos o Whatsapps y se valida que estos indicadores estén en la media de la industria: En caso de correos electrónicos: % de entregas, % de aperturas, % de clics, en el caso de Whatsapp: Entregas, lecturas e interacción.

En caso de no existir, se hace una valoración de la necesidad y que tan oportuno, además de costo/efectivo puede ser tenerlas. Se indica cuales son los KPIs necesarios, como leerlos, interpretarlos y cual debe ser la media de la industria para cada caso.

Pauta digital en sitios web, en redes sociales, en redes de google o con influenciadores de marca.

Se hace un análisis de la estrategia de pauta digital del pasado reciente y de los presupuestos utilizados, así como de los montos pagados, los objetivos y herramientas utilizadas y se define si estos montos son suficientes, cortos o excesivos.

Se revisa y valora el balance de estos presupuestos de pauta digital entre las diferentes redes utilizadas, esto bajo el concepto: Saturación de Contenido.

A partir de este análisis, se balancea el presupuesto de pauta digital, tomando en consideración el objetivo de la marca, (Que puede ser alcance, relevancia, generación de clientes, etc) así como el tipo de producto (marca), disponibilidad de otros activos digitales, etc. Y se sugieren los montos necesarios de pauta digital para cada esfuerzo de comunicación pagada y se establecen los KPIs nuevos alcanzables para optimizar la pauta digital.

Se valoran (en caso de utilizarlos), a los diferentes influenciadores y el nivel de alineación que tienen los mismos con la marca. A niveles socioeconómicos, lugares de influencia, demográficos por géneros y edades, afinidad de las audiencias. Se valora el costo por objetivo que se tiene con cada uno de ellos y se comprara contra otros esfuerzos digitales.

Se revisan todas las redes sociales utilizadas por la marca y se hace una valoración de cada una de ellas en función del tipo de producto que comercializa la empresa (por ejemplo, no es lo mismo vender chocolates, automóviles, casas, equipos especializados de fumigación). Se valoran, en un ranking la importancia de cada una de ellas en función del producto y/o marca.

Se validan todas las configuraciones de cada red social, para asegurar que la información básica que se muestra a las personas sea la correcta, pero además que la información de valor para los motores de inteligencia de cada red social, estén bien alineados con tipo de producto, mercado, etc. Esto, para buscar la eficiencia de cada motor de red social, sea orgánico o pagado.

Se estudia y evidencia los niveles socioeconómicos de los seguidores y su alineación con las propuestas comerciales de marca o de producto.

Se estudian las regiones donde se da la actividad principal de la marca, de tal forma que se pueda asegurar el impacto comercial en esa zona (por ejemplo tener una sucursal, o poder vender en línea) o en su defecto, para redirigir los esfuerzos de marca a los lugares correctos.

Se valida el alcance e interacción en los diferentes grupos demográficos por género y edad, para validar que estos grupos estén alineados con lo que se espera a nivel de producto y/o marca.

Se revisa la estrategia de publicaciones a la luz de la saturación de contenido en las diferentes redes. Se valida el tipo de contenido utilizado, así como la periodicidad de las publicaciones y los alcances orgánicos de cada uno de ellos. Se hacen las recomendaciones necesarias para mejorar los alcances orgánicos y se establecen KPIs esperables cuando se implementen los cambios.

Se estudia profundamente el historial de compra de publicidad paga en cada red social, se validan los costos por resultados y se comparan con los costos esperados para la industria del producto o la marca. Se hacen todas las recomendaciones de cambios y se documentan los resultados y mejoras esperables con esos cambios.